Cada vez son más las empresas que están enfocadas en generar un impacto positivo en su entorno, desde hace unos años se ha ido desarrollando el concepto de sostenibilidad el cual ha ido calando a lo intrínseco del sector empresarial redefiniendo el significado de éxito.
Es por este motivo que en las empresas, sobre todo los emprendimientos de pymes, apuestan a generar un triple impacto, el cual consiste en ser rentables al mismo tiempo que tienen un impacto positivo en la sociedad y en el medioambiente.
En ese sentido, se genera un triple impacto en lo económico valorando el resultado de la comercial de la empresa, gracias a la gestión, la productividad, calidad en el producto o servicio y la atención al cliente.
En genera un impacto social cuando el foco está en la comunidad y en los miembros de la empresa, realizando acciones para elevar el nivel de vida de los mismos a través de la detección y/o prevención de alguna problemática.
Y por último se genera un impacto ambiental cuando la empresa se preocupa por reducir su huella ecológica, tomando acción en concientizar a los empleados para disminuir su huella de carbono y buscando que los productos, incluyendo su proceso de fabricación sea amigable con el medio ambiente.
Este tipo de empresas mayormente conocidas como empresas B, las cuales han sido determinantes en la promoción de este nuevo concepto, en la actualidad son más las pymes que buscan certificarse como B Corporation , la cual otorga la organización sin fines de lucro B Lab a las organizaciones que adoptan este concepto.
Claves para emprender con triple impacto
Para adoptar el concepto de triple impacto en tu pyme es importante tener en cuenta 5 aspectos claves, comenzando por realizar previamente un proceso de investigación sobre empresas que han tenido éxito adoptando buenas prácticas sustentables, para que de esta manera identifiques las herramientas que se pueden adaptar a tu empresa.
Con toda la información que se reúna sobre los casos de éxitos encontrados, es esencial crear conciencia social en los miembros de la empresa, ya que para adoptar este concepto es necesario que tanto el empresario como los colaboradores compartan la misma visión.
El tomar conciencia social traerá como resultado el evaluar las prácticas laborales actuales para mejorarlas, realizando pequeños cambios dentro de las políticas de la empresa, como el reciclaje, reducir el uso de energía eléctrica, imprimir sólo lo necesario, utilizar artículos que se puedan reutilizar, etc.
Para lograr tener buenas prácticas laborales es fundamental que tanto los directivos, empleados y proveedores tenga un mismo propósito ya que el trabajo en equipo es el que hará la diferencia, y esto se logra estableciendo canales de comunicación que permitan que el mensaje llegue de manera asertiva, además de ampliar el rango de acción involucrando a los clientes comunicando la importancia que tiene para la empresa generar un impacto positivo en la comunidad y el medio ambiente.
