Las empresas necesitan estar en un constante estado de autoanálisis para mantenerse fuertes. Sin embargo, en las compañías pequeñas y medianas pasa que tratan más de sobrevivir que en superarse. Una manera de romper este estancamiento es fortaleciendo el negocio.
Por ello, compartimos algunos consejos para que tu empresa no solo sobreviva, sino que se robustezca y crezca en todos los sentidos:
- Ver la empresa como un conjunto y no como un compendio de departamentos.
- Siempre mantener el rumbo y los objetivos claros.
- Identificar lo que genera más valor. Ya sea el capital humano o la tecnología, por ejemplo. Diseña una estrategia para impulsar las ventajas competitivas de tu negocio.
- Define bien el mercado y mantente al tanto de los cambios que se generan en él.
Esto te ayudará a detectar oportunidades. - Revisa constantemente las finanzas, los pasivos y los activos, para que ante un cambio rápidamente puedas hacer los ajustes de rigor.
- Mide constantemente todo lo que sea cuantificable. Utiliza encuestas electrónicas o pide recomendaciones escritas a tus clientes.
- Analiza la rentabilidad de tus productos, servicios y del negocio en general.
- Revisa los riesgos y las oportunidades dentro y fuera de la empresa.
